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La caza furtiva, uno de los grandes desafíos ambientales para las y los misioneros
Por Manuel Jaramillo, director general de Fundación Vida Silvestre Argentina
La selva misionera es sin duda uno de los ambientes naturales más ricos en formas de vida del país, ya que allí se conserva más de la mitad de la biodiversidad de Argentina. A su vez, los servicios ecosistémicos que ofrece este ambiente son fundamentales para la vida y bienestar de la población, así como para las principales actividades económicas de la provincia y la región. Por todo esto, resulta vital la conservación y el uso sustentable y responsable de la selva, manteniendo su funcionalidad y los servicios que ofrece para las generaciones presentes y futuras.
La biodiversidad, majestuosa y exuberante como la vemos, reviste una fragilidad, que para muchos es imperceptible. El equilibrio del ecosistema se asemeja a un mecanismo de relojería, en la que el deterioro o falla de una sola pieza impacta en el funcionamiento integral del sistema.
Es por ello que desde Vida Silvestre insistimos tanto en detener la cacería, una de las problemáticas que pone en riesgo a la fauna de la selva misionera. Los animales y la función ecológica de cada especie en el ambiente son piezas claves de todo el sistema. Un ambiente sin animales pierde su capacidad de regeneración, de reciclaje de nutrientes, de polinización, de oferta de los servicios ecosistémicos que dan sustento a las personas y nuestras actividades.
A nivel país Misiones se destaca en materia de conservación de sus recursos naturales. Aún con varios puntos pendientes de mejora, si comparamos con otras provincias, la conservación en la tierra colorada es mucho mayor, pero aún puede y debe mejorarse.
El próximo 7 de mayo los misioneros tendrán la responsabilidad de elegir a sus nuevos representantes, las autoridades que sean electas tendrán, en materia ambiental y de conservación, el enorme desafío por delante de ir por mucho más. En un contexto de cambio climático y pérdida de diversidad biológica que preocupa al mundo entero, Misiones tiene la oportunidad de seguir marcando la diferencia, consolidando políticas de estado, que trasciendan a los gobiernos de turno.
La cacería, salvo la practicada con métodos tradicionales por los pueblos originarios, es una mala práctica que está prohibida por ley en Misiones. Es una problemática que debe seguir siendo enfrentada mediante el control, la fiscalización y la prevención. Pero a su vez, es necesario reforzar e incrementar los esfuerzos en educación ambiental y extensión comunitaria. Recurriendo a reforzar los conocimientos, la concientización y la revalorización de nuestros recursos naturales. Desde Vida Silvestre sostenemos que no se puede conservar y cuidar aquello que no se conoce.
Todo ello, claro está, implica la designación de presupuesto adecuado para tal fin, garantizando los recursos necesarios para el trabajo fuera de las áreas protegidas, que es tan importante como el que se realiza dentro. A su vez, es fundamental que el cuerpo de guardaparques cuente con el personal necesario, con el equipamiento y las herramientas adecuadas para cumplir con sus funciones, así como las capacidades necesarias para enfrentar y lidiar con las diversas situaciones que pueden ocurrir.
Desde Vida Silvestre esperamos que los misioneros tengan en cuenta la importancia del ambiente, su conservación y cuidado al momento de definir su voto. Desde la organización estaremos siempre dispuestos y abiertos a trabajar con las nuevas autoridades para hacer frente a la caza furtiva, así como a otras problemáticas ambientales que afectan y enfrenta la selva misionera.
La biodiversidad, majestuosa y exuberante como la vemos, reviste una fragilidad, que para muchos es imperceptible. El equilibrio del ecosistema se asemeja a un mecanismo de relojería, en la que el deterioro o falla de una sola pieza impacta en el funcionamiento integral del sistema.
Es por ello que desde Vida Silvestre insistimos tanto en detener la cacería, una de las problemáticas que pone en riesgo a la fauna de la selva misionera. Los animales y la función ecológica de cada especie en el ambiente son piezas claves de todo el sistema. Un ambiente sin animales pierde su capacidad de regeneración, de reciclaje de nutrientes, de polinización, de oferta de los servicios ecosistémicos que dan sustento a las personas y nuestras actividades.
A nivel país Misiones se destaca en materia de conservación de sus recursos naturales. Aún con varios puntos pendientes de mejora, si comparamos con otras provincias, la conservación en la tierra colorada es mucho mayor, pero aún puede y debe mejorarse.
El próximo 7 de mayo los misioneros tendrán la responsabilidad de elegir a sus nuevos representantes, las autoridades que sean electas tendrán, en materia ambiental y de conservación, el enorme desafío por delante de ir por mucho más. En un contexto de cambio climático y pérdida de diversidad biológica que preocupa al mundo entero, Misiones tiene la oportunidad de seguir marcando la diferencia, consolidando políticas de estado, que trasciendan a los gobiernos de turno.
La cacería, salvo la practicada con métodos tradicionales por los pueblos originarios, es una mala práctica que está prohibida por ley en Misiones. Es una problemática que debe seguir siendo enfrentada mediante el control, la fiscalización y la prevención. Pero a su vez, es necesario reforzar e incrementar los esfuerzos en educación ambiental y extensión comunitaria. Recurriendo a reforzar los conocimientos, la concientización y la revalorización de nuestros recursos naturales. Desde Vida Silvestre sostenemos que no se puede conservar y cuidar aquello que no se conoce.
Todo ello, claro está, implica la designación de presupuesto adecuado para tal fin, garantizando los recursos necesarios para el trabajo fuera de las áreas protegidas, que es tan importante como el que se realiza dentro. A su vez, es fundamental que el cuerpo de guardaparques cuente con el personal necesario, con el equipamiento y las herramientas adecuadas para cumplir con sus funciones, así como las capacidades necesarias para enfrentar y lidiar con las diversas situaciones que pueden ocurrir.
Desde Vida Silvestre esperamos que los misioneros tengan en cuenta la importancia del ambiente, su conservación y cuidado al momento de definir su voto. Desde la organización estaremos siempre dispuestos y abiertos a trabajar con las nuevas autoridades para hacer frente a la caza furtiva, así como a otras problemáticas ambientales que afectan y enfrenta la selva misionera.